El adiós (Imagen nº 7 . Septiembre 2017)

Partiste en tu velero una mañana
diciéndome: -Hasta luego, vida mía.
En tu bello semblante, la armonía
y esa sonrisa franca, tan lozana.

Tras un rato asomada a la ventana,
cuando el barquito ya no se veía,
extrañando tu grata compañía
comencé mi tarea cotidiana.

Mas, de pronto, sentí un escalofrío,
un grito mudo, áspero y mortal
y un lúgubre presagio, tan sombrío

que supe en mi interior que algo iba mal.
Jamás volvió a la playa aquel navío,
solo sus restos, tras el temporal.

...




​

 

Muchas gracias, Ligia, por acudir tan rauda a mi espacio. La he visto tan desvalida mirando al velero en lontananza...

Un abrazo.

 

Otro millón de gracias de nuevo.
Besos.

 

Gracias, Isabel, por tu cariñoso comentario. Ambas sabemos de veleros que jamás volvieron y de mares que engullen vidas, pero las nuestras marchan adelante, viento en popa a toda vela. No sé por qué la chica de la ventana me inspiró la tragedia.
Un besito.

 

Al final te voy a coger ojeriza. Me explico:

Hago un soneto sobre la imagen, lo lees y al poco tiempo ya tienes escrito uno que lo supera.
Y tienes la desfachatez de cargarte al pobre marinerito...


Ahora ya en serio, agradezco mucho leer tus poemas, es un lujo poder pasar por aquí.

Un abrazo, nos leemos.

 

Muchas gracias por tu amable comentario, es un lujo recibirlos.
Saludos cordiales.

 

Mira qué simpático el Oncina, jajá. ¿Cogerme ojeriza? ¿No te doy penilla?
Pero si me inspiró el tuyo, que se iba triste y yo lo maté, para que estuvieran tristes los dos.
Gracias por lo del lujo, pero no me seas exagerado.
Un abrazo de nuevo.

 

Un poema de ausencia con presentimientos tristes y evocadores del bien perdido. Emotivo y bello.
Saludos, Eratalia

 

Partir, partir y no regresar, ¡qué put...! Excelentes versos y excelente la tristeza, si es que puede ser excelente. Felicitaciones por hacer lo difícil, fácil.

 

Dan para mucho las imágenes, pues en su misterioso encanto, cada uno vemos aquella parte que acomoda nuestro instante. Tus versos se pierden entre la amable despedida y la tragedia que se presiente en un momento por la protagonista. Es un poema realmente bello, un placer haber podido leerlo. Un beso. Luis.

 

Precioso soneto desde la ventana, pero no fue que ese galán de bello semblante y sonrisa franca no volviera, sino que la mar con él se quedó; le hizo una mala jugada a la dulce mujer de la ventana.
Muy bueno Eritalia, me ha gustado mucho. Un beso.

 

Muchísimas gracias, May, por tan benevolente crítica.
Saludos cordiales.

 

Muchas gracias por tu amable comentario.
Un saludo muy cordial.

 

Muchas gracias por haber pasado a dejar tu parecer respecto a mi poema, estoy encantada con tu crítica.
Un abrazo.

 

Pues me alegra mucho que te hayan quedado ganas de repetir.
Otro saludo cordial para ti.

 

Fuera como fuese, el caso es que a la pobre muchacha se le truncó la vida... Pero el tiempo todo lo cura y luego ya se rehizo y encontró otro amor y etcétera, etcétera.
Con el cambio de avatar no te reconocía.
Saludos cordiales.

 

Es verdad, el tiempo para estos casos es nuestro mejor aliado. Y seguro que comió perdices y fue muy feliz con el nuevo amor.
Ha sido un cambio de look, para esconderme de mi mismo. Gracias por encontrarme. Un beso. José Ignacio.

 

Seguro que sí, pero el trauma está ahí, agazapado bajo algún pliegue de su piel.
Lo que no te mata te hace más fuerte, como dijo alguien...
Un abrazo.

 

Muchas gracias Eratalia por responder a mi comentario. Temía que no llegara tu respuesta y me creara un trauma. Ahora me siento más fuerte.
Un beso.

 

Pues no sabes lo que me alegro!!

 

Terrible historia contada con mucho acierto poético en catorce versos, que según don Lope, hechos así tal cual los veo, con sus impecables cuartetos y tercetos, dicen que es un soneto.

Me ha gustado mucho, Eratalia.

Mi felicitación con un cordial saludo.

 

Ay, porfa, no me haga usté de reír, que casi me atraganto.

Que la historia es para llorar, pero el comentario es para soltar la carcajada. O a mí me lo ha parecido, que cada uno interpreta las cosas a su manera...
Muchas gracias y muchos saludos.

 

Pues mujer, he intentado hacer un comentario a tu estilo, con algo de humor y más de seriedad, o séase una de cal y otra de arena; decide tú cual es la cal y cual la arena pues aunque la seriedad está muy bien, el humor no está para ser desdeñado, "amos", digo yo.

Cordial saludo otra vez.