1. Invitado, ven y descarga gratuitamente el cuarto número de nuestra revista literaria digital "Eco y Latido"

    !!!Te va a encantar, no te la pierdas!!!

    Cerrar notificación

Mayúsculas en poesía

Tema en 'Lecciones de ortografía y gramática' comenzado por Arkhazul, 9 de Septiembre de 2013. Respuestas: 9 | Visitas: 41734

  1. Arkhazul

    Arkhazul Poeta que considera el portal su segunda casa

    Se incorporó:
    14 de Septiembre de 2007
    Mensajes:
    7.764
    Me gusta recibidos:
    1.319
    Género:
    Hombre
    Son los usos generales, en rojo aparece el apartado sobre poesía, bastante simple:

    mayúsculas. La escritura normal utiliza habitualmente las letras minúsculas, si bien, por distintos motivos, pueden escribirse enteramente con mayúsculas palabras, frases e incluso textos enteros (→ 2); pero lo usual es que las mayúsculas se utilicen solo en posición inicial de palabra, y su aparición está condicionada por distintos factores (→ 3 y 4).
    1. Cuestiones formales generales
    1.1. El empleo de la mayúscula no exime de poner la tilde cuando así lo exijan las reglas de acentuación (→ tilde[SUP]2[/SUP], 7): ÁFRICA, África. Únicamente las siglas, que se escriben enteramente en mayúsculas, no llevan nunca tilde: CIA (del ingl. Central Intelligence Agency), y no [​IMG]CÍA.
    1.2. Cuando los dígrafos ch, gu, ll y qu se emplean en mayúscula al inicio de una palabra escrita con minúsculas, solo adopta forma de mayúscula el primero de sus componentes: Chillida, Guinea, Llerena, Quevedo; pero si los dígrafos forman parte de una palabra escrita enteramente en mayúsculas, deben ir en mayúscula sus dos componentes: CHILLIDA, GUINEA, LLERENA, QUEVEDO. Cuando los dígrafos forman parte de una sigla, se escribe en mayúscula solo el primero de sus componentes (→ sigla, 5c): PCCh (Partido Comunista de China).
    1.3. La forma mayúscula de las letras i y j carece del punto que llevan en su grafía minúscula: Inés, Javier.
    2. Uso de mayúsculas en palabras o frases enteras
    2.1. Se escriben enteramente en mayúscula las siglas y algunos acrónimos: ISBN, OTI, ONG. Se escriben en minúscula, en cambio, los acrónimos que el uso ha convertido en sustantivos comunes: láser, radar, uvi. Cuando los acrónimos son nombres propios y tienen más de cuatro letras, solo se escribe en mayúscula la inicial: Unicef, Unesco. (→ sigla, 5b).
    2.2. Se utiliza la escritura en mayúsculas con el fin de destacar determinadas frases o palabras dentro de un escrito. Así, suelen escribirse enteramente en mayúsculas:
    a) Las palabras o frases que aparecen en las cubiertas y portadas de los libros impresos, así como los títulos de cada una de sus divisiones internas (partes, capítulos, escenas, etc.).
    b) Las cabeceras de diarios y revistas: EL UNIVERSAL, LA NACIÓN, TIEMPO.
    c) Las inscripciones en lápidas y monumentos.
    d) En textos jurídicos y administrativos —decretos, sentencias, bandos, edictos, certificados o instancias—, el verbo o verbos que presentan el objetivo fundamental del documento: CERTIFICA, EXPONE, SOLICITA.
    e) En textos de carácter informativo, las frases que expresan el contenido fundamental del escrito: Por orden expresa de la dirección, se comunica a todos los empleados que, a partir de ahora, ESTÁ PROHIBIDO FUMAR DENTRO DE LAS DEPENDENCIAS DE LA EMPRESA.
    f) Los textos de los carteles de aviso, para asegurar su visibilidad: SE RUEGA NO FUMAR; PROHIBIDO EL PASO.
    3. Uso de mayúscula inicial exigido por la puntuación. De acuerdo con la posición que la palabra ocupe en el escrito, la puntuación exige su escritura con mayúscula inicial en los casos siguientes:
    3.1. Si se trata de la primera palabra de un escrito o va después de punto: Hoy no iré. Mañana puede que sí.
    3.2. Si sigue a los puntos suspensivos, cuando estos cierran un enunciado: Compramos mariscos, solomillos, vino... La cena resultó un éxito. Pero si los puntos suspensivos no cierran el enunciado, sino que este continúa tras ellos, la palabra que los sigue se escribe con inicial minúscula: Estoy pensando que... aceptaré; en esta ocasión debo arriesgarme. (→ puntos suspensivos, 1).
    3.3. Después de los dos puntos, debe comenzarse el texto con inicial mayúscula en los casos siguientes (→ dos puntos, 1.3, 1.4 y 1.6):
    a) Tras los dos puntos que siguen a la fórmula de encabezamiento o saludo de una carta: Muy señor mío: / Le agradeceré...
    b) Tras los dos puntos que siguen al verbo fundamental de un documento jurídico-administrativo: CERTIFICA: / Que D. José Álvarez García ha seguido el Curso de Técnicas Audiovisuales...
    c) Tras los dos puntos que anuncian la reproducción de una cita o palabras textuales: Pedro dijo: «No volveré hasta las nueve».
    3.4. En frases interrogativas y exclamativas existen dos posibilidades:
    3.4.1. Si la pregunta o la exclamación constituyen la totalidad del enunciado, y sus signos de cierre equivalen a un punto, la primera palabra de la pregunta o la exclamación se escribe con inicial mayúscula, así como la palabra que inicia la oración siguiente:
    ¿En qué año nació tu abuelo? Si no me equivoco, tenía la misma edad que el mío.
    ¡Qué miedo pasamos ayer! Se nos hizo de noche mientras bajábamos de la montaña.
    3.4.2. Si la pregunta o la exclamación constituyen solo una parte del enunciado, pueden darse dos casos:
    a) La pregunta o la exclamación inician el enunciado. En este caso, la primera palabra que sigue a los signos de apertura (¿ ¡) se escribe con mayúscula y la que sigue a los signos de cierre (? !) se escribe con minúscula: ¿Qué sorpresas me deparará este día?, me pregunto ante el espejo cada mañana. Esto ocurre también cuando se suceden varias preguntas o exclamaciones breves que pueden ser consideradas un único enunciado y separarse con signos de coma o de punto y coma: ¿Cómo te llamas?, ¿en qué trabajas?, ¿dónde naciste?
    b) La pregunta o la exclamación no están colocadas al comienzo del enunciado, sino que siguen a otra palabra o palabras que también forman parte de este. En ese caso, la primera palabra de la pregunta o de la exclamación (la que sigue a los signos de apertura) se escribe con minúscula:
    Natalia, ¿puedes ayudarme?
    Pero ¡qué alegría tan grande verte por aquí!
    3.5. Antes era costumbre, en los poemas, emplear la mayúscula al principio de cada verso, razón por la cual las letras de esta forma tomaron el nombre de «versales» (mayúsculas de imprenta). En la poesía moderna, esta costumbre está en desuso.
    4. Uso de mayúscula inicial independientemente de la puntuación. Se escriben con letra inicial mayúscula todos los nombres propios y también los comunes que, en un contexto dado o en virtud de determinados fenómenos (como, por ejemplo, la antonomasia), funcionan con valor de tales, es decir, cuando designan seres o realidades únicas y su función principal es la identificativa. En otras ocasiones, la mayúscula responde a otros factores, como la necesidad de distinguir entre sentidos diversos de una misma palabra (mayúscula diacrítica), o a razones expresivas o de respeto (mayúscula de respeto). Se escriben con inicial mayúscula las palabras siguientes:
    4.1. Los nombres propios de persona, animal y cosa singularizada: Beatriz, Platero, Tizona (espada del Cid).
    4.2. Los nombres de divinidades: Dios, Jehová, Alá, Afrodita, Júpiter, Amón.
    4.3. Los apellidos: Jiménez, García, Mendoza. Si un apellido español comienza por preposición, o por preposición y artículo, estos se escriben con minúscula cuando acompañan al nombre de pila (Juan de Ávalos, Pedro de la Calle); pero si se omite el nombre de pila, la preposición debe escribirse con mayúscula (señor De Ávalos, De la Calle). Si el apellido no lleva preposición, sino solamente artículo, este se escribe siempre con mayúscula, independientemente de que se anteponga o no el nombre de pila (Antonio La Orden, señor La Orden). También se escriben con mayúscula los nombres de las dinastías derivados de un apellido: los Borbones, los Austrias, salvo que se utilicen como adjetivos, caso en el que se escriben con minúscula: los reyes borbones. Por otra parte, deben conservar la mayúscula los apellidos de autores (a veces acompañados también del nombre de pila) cuando designan sus obras: «Incendiaron la iglesia, y con ella las tres joyas pictóricas —un Goya [...], un Bayeu [...] y un José del Castillo» (Laín Descargo [Esp. 1976]).
    4.4. Los sobrenombres, apodos y seudónimos: Manuel Benítez, el Cordobés; José Nemesio, alias el Chino; Alfonso X el Sabio; el Libertador; el Greco; el Pobrecito Hablador (seudónimo del escritor Mariano José de Larra). El artículo que antecede a los seudónimos, apodos y sobrenombres, tanto si estos acompañan al nombre propio como si lo sustituyen, debe escribirse con minúscula: Ayer el Cordobés realizó una estupenda faena; por lo tanto, si el artículo va precedido de las preposiciones a o de, forma con ellas las contracciones al (→ al) y del (→ del): Me gusta mucho este cuadro del Greco (no [​IMG]de El Greco); El pueblo llano adoraba al Tempranillo (no [​IMG]a El Tempranillo).
    4.5. Los nombres comunes que, por antonomasia, se utilizan para designar a una persona en lugar del nombre propio: el Mantuano (por Virgilio), el Sabio(por Salomón), el Magnánimo (por el rey Alfonso V), así como los que se refieren, también por antonomasia, a Dios, a Jesucristo o a la Virgen: el Creador, el Todopoderoso, el Mesías, el Salvador, la Purísima, la Inmaculada.
    4.6. Los nombres abstractos personificados, utilizados alegóricamente: la Muerte, la Esperanza, el Mal.
    4.7. Los nombres propios geográficos (continentes, países, ciudades, comarcas, mares, ríos, etc.): América, África, Italia, Canadá, Toledo, Lima, las Alpujarras, la Rioja (comarca), la Mancha (comarca), el Adriático, el Mediterráneo, el Orinoco, el Ebro, los Andes, el Himalaya. Como se ve en los ejemplos, determinados nombres propios geográficos van necesariamente acompañados de artículo, como ocurre con las comarcas, los mares, los ríos y las montañas. En otros casos, como ocurre con determinados países, el uso del artículo es opcional: Perú o el Perú (→ el, 5). El artículo, en todos estos casos, debe escribirse con minúscula, porque no forma parte del nombre propio. Pero cuando el nombre oficial de un país, una comunidad autónoma, una provincia o una ciudad lleve incorporado el artículo, este debe escribirse con mayúscula: El Salvador, La Rioja (comunidad autónoma), Castilla-La Mancha (comunidad autónoma), La Pampa, La Habana, Las Palmas. Cuando el artículo forma parte del nombre propio no se realiza en la escritura la amalgama con las preposiciones de o a: Mi padre acaba de regresar de El Cairo (no [​IMG]del Cairo); Este verano iremos a El Salvador (no [​IMG]al Salvador).
    Los nombres comunes genéricos que acompañan a los nombres propios geográficos (ciudad, río, mar, océano, sierra, cordillera, cabo, golfo, estrecho,etc.) deben escribirse con minúscula: la ciudad de Panamá, el río Ebro, la sierra de Gredos, la cordillera de los Andes, el cabo de Hornos. Solo si el nombre genérico forma parte del nombre propio, se escribe con mayúscula inicial: Ciudad Real, Río de la Plata, Sierra Nevada, los Picos de Europa. También se escriben con inicial mayúscula algunos de estos nombres genéricos cuando, por antonomasia, designan un lugar único y, por lo tanto, funcionan a modo de nombre propio. Estas antonomasias están lógicamente limitadas en su uso a la comunidad de hablantes que comparten una misma geografía, para los que la identificación de la referencia es inequívoca, como ocurre, por ejemplo, entre los chilenos, con la Cordillera (por la cordillera de los Andes) o, entre los españoles, con la Península (por el territorio peninsular español) o el Estrecho (por el estrecho de Gibraltar). El hecho de escribir Península Ibérica con mayúsculas se debe a que con esta expresión nos referimos a una entidad de carácter histórico-político, y no a un mero accidente geográfico.
    4.8. Las designaciones que, por antonomasia, tienen algunos topónimos y que se usan como alternativa estilística a su nombre oficial: el Nuevo Mundo (porAmérica), la Ciudad Eterna (por Roma).
    4.9. Los sustantivos y adjetivos que forman parte del nombre de determinadas zonas geográficas, que generalmente abarcan distintos países, pero que se conciben como áreas geopolíticas con características comunes: Occidente, Oriente Medio, Cono Sur, Hispanoamérica, el Magreb.
    4.10. Los nombres de vías y espacios urbanos. Al igual que en el caso de los nombres geográficos, solo el nombre propio debe ir escrito con mayúscula, y no los nombres comunes genéricos que acompañan a este, como calle, plaza, avenida, paseo, etc., que deben escribirse con minúscula: calle (de) Alcalá, calle Mayor, plaza de España, avenida de la Ilustración, paseo de Recoletos. Sin embargo, se escribirán en mayúscula los nombres genéricos de vías o espacios urbanos procedentes del inglés: Oxford Street, Quinta Avenida, Central Park, como es usual en esa lengua.
    4.11. Los nombres de galaxias, constelaciones, estrellas, planetas y satélites: la Vía Láctea, la Osa Mayor, la Estrella Polar, Venus, Ganimedes. Las palabras Sol y Luna solo suelen escribirse con mayúscula inicial en textos científicos de temática astronómica, en los que designan los respectivos astros: «Entre la esfera de fuego y la de las estrellas fijas están situadas las esferas de los distintos planetas, empezando por la esfera de la Luna y, a continuación, las esferas de Mercurio, Venus, el Sol, Marte, Júpiter y Saturno» (Torroja Sistemas [Esp. 1981]); pero, excepto en este tipo de textos, se escriben normalmente con minúscula: El sol lucía esplendoroso esa mañana; Entra mucho sol por la ventana; Negros nubarrones ocultaron la luna por completo; Me pongo muy nervioso cuando hay luna llena. La palabra tierra se escribe con mayúscula cuando designa el planeta: «Dios le hizo ver las estrellas jamás vistas desde la Tierra» (Fuentes Naranjo [Méx. 1993]); pero con minúscula en el resto de sus acepciones: El avión tomó tierra; Esta tierra es muy fértil; He vuelto a la tierra de mis mayores.
    4.12. Los nombres de los signos del Zodiaco: Aries, Géminis, Sagitario; también los nombres alternativos que aluden a la representación iconográfica de cada signo: Balanza (por Libra), Toro (por Tauro), Carnero (por Aries), Gemelos (por Géminis), Cangrejo (por Cáncer), Pez (por Piscis), Escorpión(por Escorpio), León (por Leo), Virgen (por Virgo). Se escriben con minúscula, en cambio, cuando dejan de ser nombres propios por designar, genéricamente, a las personas nacidas bajo cada signo: Raquel es sagitario; Los géminis son muy volubles.
    4.13. Los nombres de los cuatro puntos cardinales (Norte, Sur, Este, Oeste) y de los puntos del horizonte (Noroeste, Sudeste, etc.), cuando nos referimos a ellos en su significado primario, como tales puntos, o cuando forman parte de un nombre propio: La brújula señala el Norte; La nave puso rumbo al Noroeste; Corea del Norte; la Cruz del Sur. También se escriben con mayúsculas los casos de Polo Norte y Polo Sur. Sin embargo, cuando los nombres de los puntos cardinales o de los puntos del horizonte están usados en sentidos derivados y se refieren a la orientación o la dirección correspondientes, se escribirán en minúscula: el sur de Europa, el noroeste de la ciudad, el viento norte. También se escribirán en minúscula estos puntos cuando estén usados en aposición:latitud norte, hemisferio sur, rumbo nornoroeste. En el caso de las líneas imaginarias, tanto de la esfera terrestre como celeste, se recomienda el uso de la minúscula: ecuador, eclíptica, trópico de Cáncer.
    4.14. Los sustantivos y adjetivos que componen el nombre de entidades, organismos, departamentos o divisiones administrativas, edificios, monumentos, establecimientos públicos, partidos políticos, etc.: el Ministerio de Hacienda, la Casa Rosada, la Biblioteca Nacional, el Museo de Bellas Artes, la Real Academia de la Historia, el Instituto Caro y Cuervo, la Universidad Nacional Autónoma de México, la Facultad de Medicina, el Departamento de Recursos Humanos, el Área de Gestión Administrativa, la Torre de Pisa, el Teatro Real, el Café de los Artistas, el Partido Demócrata. También se escribe con mayúscula el término que en el uso corriente nombra de forma abreviada una determinada institución o edificio: la Nacional (por la Biblioteca Nacional), el Cervantes (por el Instituto Cervantes), la Complutense (por la Universidad Complutense), el Real (por el Teatro Real).
    4.15. Los nombres de los libros sagrados y sus designaciones antonomásticas: la Biblia, el Corán, el Avesta, el Talmud, la(s) Sagrada(s) Escritura(s).También los nombres de los libros de la Biblia: Génesis, Levítico, Libro de los Reyes, Hechos de los Apóstoles.
    4.16. Los sustantivos y adjetivos que forman parte del nombre de publicaciones periódicas o de colecciones: La Vanguardia, Nueva Revista de Filología Hispánica, Biblioteca de Autores Españoles.
    4.17. La primera palabra del título de cualquier obra de creación (libros, películas, cuadros, esculturas, piezas musicales, programas de radio o televisión, etc.); el resto de las palabras que lo componen, salvo que se trate de nombres propios, deben escribirse con minúscula: Últimas tardes con Teresa, La vida es sueño, La lección de anatomía, El galo moribundo, Las cuatro estaciones, Las mañanas de la radio, Informe semanal. En el caso de los títulos abreviados con que se conocen comúnmente determinados textos literarios, el artículo que los acompaña debe escribirse con minúscula: el Quijote, el Lazarillo, la Celestina.
    4.18. Los sustantivos y adjetivos que forman parte del nombre de documentos oficiales, como leyes o decretos, cuando se cita el nombre oficial completo:Real Decreto 125/1983 (pero el citado real decreto), Ley para la Ordenación General del Sistema Educativo (pero la ley de educación, la ley sálica,etc.). También se escriben con mayúscula los nombres de los documentos históricos: Edicto de Nantes, Declaración Universal de los Derechos Humanos.
    4.19. Los nombres de festividades religiosas o civiles: Epifanía, Pentecostés, Navidad, Corpus, Día de la Constitución, Año Nuevo, Feria de Abril.
    4.20. Las advocaciones de la Virgen: la Virgen de Guadalupe, la Virgen del Rocío. También las celebraciones o festividades a ellas dedicadas: el Rocío, el Pilar.
    4.21. Los nombres de órdenes religiosas: el Carmelo, el Temple, la Merced. También se escribe con mayúscula la palabra Orden cuando acompaña al nombre propio: la Orden del Temple.
    4.22. Los nombres de marcas comerciales. Las marcas comerciales son nombres propios, de forma que, utilizados específicamente para referirse a un producto de la marca, han de escribirse con mayúscula: Me gusta tanto el Cinzano como el Martini; Me he comprado un Seat; pero cuando estos nombres pasan a referirse no exclusivamente a un objeto de la marca en cuestión, sino a cualquier otro con características similares, se escriben con minúscula: Me aficioné al martini seco en mis años de estudiante (al vermú seco, de cualquier marca).
    4.23. Las palabras que forman parte de la denominación oficial de premios, distinciones, certámenes y grandes acontecimientos culturales o deportivos: el Premio Cervantes, los Goya, la Gran Cruz de la Orden de Alfonso X el Sabio, la Bienal de Venecia, la Feria del Libro, los Juegos Olímpicos. Por lo que respecta a los premios, cuando nos referimos al objeto material que los representa o a la persona que los ha recibido, se utiliza la minúscula: Esa actriz ya tiene dos goyas; Ha colocado el óscar encima del televisor; Esta noche entrevistan al nobel de literatura de este año.
    4.24. Los sustantivos y adjetivos que forman el nombre de disciplinas científicas, cuando nos referimos a ellas como materias de estudio, y especialmente en contextos académicos (nombres de asignaturas, cátedras, facultades, etc.) o curriculares: Soy licenciado en Biología; Me he matriculado en Arquitectura; El profesor de Cálculo Numérico es extraordinario. Fuera de los contextos antes señalados, se utiliza la minúscula: La medicina ha experimentado grandes avances en los últimos años; La psicología de los niños es muy complicada. Los nombres de asignaturas que no constituyen la denominación de una disciplina científica reciben el mismo tratamiento que si se tratase del título de un libro o de una conferencia, esto es, solo la primera palabra se escribe con mayúscula: Introducción al teatro breve del siglo xvii español, Historia de los sistemas filosóficos. También se escriben con mayúscula los sustantivos y adjetivos que dan nombre a cursos, congresos, seminarios, etc: 1.[SUP]er[/SUP] Curso de Crítica Textual, XV Congreso Mundial de Neonatología, Seminario de Industrias de la Lengua.
    4.25. La primera palabra del nombre latino de las especies vegetales y animales: Pimpinella anisum, Panthera leo (los nombres científicos latinos deben escribirse, además, en cursiva). Se escriben también con mayúscula los nombres de los grupos taxonómicos zoológicos y botánicos superiores al género, cuando se usan en aposición: orden Roedores, familia Leguminosas; pero estos mismos términos se escriben con minúscula cuando se usan como adjetivos o como nombres comunes: El castor es un mamífero roedor; Hemos tenido una buena cosecha de leguminosas.
    4.26. Los nombres de edades y épocas históricas, cómputos cronológicos, acontecimientos históricos y movimientos religiosos, políticos o culturales: la Edad de los Metales, la Antigüedad, la Edad Media, la Hégira, el Cisma de Occidente, la Contrarreforma, la Primera Guerra Mundial, la Revolución de los Claveles, el Renacimiento. Igualmente se escriben con mayúscula los sustantivos que dan nombre a eras y períodos geológicos: Cuaternario, Mioceno, Pleistoceno, Jurásico. El adjetivo especificador que acompaña, en estos casos, a los sustantivos Revolución e Imperio se escribe con minúscula: la Revolución francesa, el Imperio romano.
    4.27. Determinados nombres comunes cuando, por antonomasia, designan una sola de las realidades de su misma clase: el Diluvio (referido al diluvio bíblico),la Reconquista (referida a la de los territorios ocupados por los musulmanes, llevada a cabo por los reinos cristianos peninsulares durante la Edad Media), el Muro (referido al que separaba en Berlín los sectores oriental y occidental).
    4.28. Determinados nombres, cuando designan entidades o colectividades institucionales: la Universidad, el Estado, el Ejército, el Reino, la Marina, la Judicatura, el Gobierno. En muchos casos, esta mayúscula tiene una función diacrítica o diferenciadora, ya que permite distinguir entre acepciones distintas de una misma palabra: Iglesia (‘institución’) / iglesia (‘edificio’), Ejército (‘institución’) / ejército (‘conjunto de soldados’), Gobierno (‘conjunto de los ministros de un Estado’) / gobierno (‘acción de gobernar’). La mayúscula diacrítica afecta tanto al singular como al plural: «Europa es importante para los Gobiernos, pero sobre todo para los ciudadanos» (País [Esp.] 9.1.97).
    4.29. Los nombres de conceptos religiosos como el Paraíso, el Infierno, el Purgatorio, etc., siempre que se usen en su sentido religioso originario, y no en usos derivados o metafóricos, pues, en ese caso, se escriben con minúscula: Aquella isla era un paraíso; La noche pasada fue un infierno.
    4.30. En textos religiosos, suelen escribirse con mayúscula, en señal de respeto, los pronombres personales Tú, Ti, Sí, Vos, Él, Ella, referidos a Dios o a la Virgen.
    4.31. Los títulos, cargos y nombres de dignidad, como rey, papa, duque, presidente, ministro, etc., que normalmente se escriben con minúscula (→ 6.9), pueden aparecer en determinados casos escritos con mayúscula. Así, es frecuente, aunque no obligatorio, que estas palabras se escriban con mayúscula cuando se emplean referidas a una persona concreta, sin mención expresa de su nombre propio: El Rey inaugurará la nueva biblioteca; El Papa visitará la India en su próximo viaje. Por otra parte, por razones de respeto, los títulos de los miembros de la familia reinante en España suelen escribirse con mayúscula, aunque vayan seguidos del nombre propio de la persona que los posee, al igual que los tratamientos de don y doña a ellos referidos: el Rey Don Juan Carlos, el Príncipe Felipe, la Infanta Doña Cristina. También es costumbre particular de las leyes, decretos y documentos oficiales, por razones de solemnidad, escribir con mayúsculas las palabras de este tipo: el Rey de España, el Jefe del Estado, el Presidente del Gobierno, el Secretario de Estado de Comercio. Por último, es muy frecuente que los cargos de cierta categoría se escriban con mayúscula en el encabezamiento de las cartas dirigidas a las personas que los ocupan.
    4.32. En textos de carácter publicitario, propagandístico o similar, es frecuente la aparición de mayúsculas no justificadas desde el punto de vista ortográfico, así como el fenómeno inverso, esto es, la aparición de minúsculas donde las normas prescriben la mayúscula. Estos usos expresivos o estilísticos, cuya finalidad es llamar la atención del receptor para asegurar así la eficacia del mensaje, no deben extenderse, en ningún caso, a otro tipo de escritos.
    4.33. También es habitual que en textos pertenecientes a ámbitos particulares se escriban con mayúscula las palabras que designan conceptos de especial relevancia dentro de esos ámbitos. Así, por ejemplo, es normal ver escritos con mayúscula, en textos religiosos, palabras como Sacramento, Bautismo, Misa;o, en textos militares, las palabras Bandera o Patria. Estas mayúsculas, que no deben extenderse a la lengua general, obedecen únicamente a razones expresivas o de respeto.
    5. Otros usos de las mayúsculas. Se escriben con mayúsculas los números romanos (→ números, 3), algunas abreviaturas (→ abreviatura, 6b) y algunos símbolos (→ símbolo, 4).
    6. Casos en que no debe usarse la mayúscula inicial. Se escriben con minúscula inicial, salvo que la mayúscula venga exigida por la puntuación (→ 3), las palabras siguientes:
    6.1. Los nombres de los días de la semana, de los meses y de las estaciones del año: lunes, abril, verano. Solo se escriben con mayúscula cuando forman parte de fechas históricas, festividades o nombres propios: Primero de Mayo, Primavera de Praga, Viernes Santo, Hospital Doce de Octubre.
    6.2. Los nombres de las notas musicales: do, re, mi, fa, sol, la, si.
    6.3. Los nombres propios que se usan como nombres comunes. Es muy frecuente que determinados nombres propios acaben designando un género o una clase de objetos o personas. Esto ocurre en los casos siguientes:
    a) Nombres propios de persona que pasan a designar genéricamente a quienes poseen el rasgo más característico o destacable del original: Mi tía Petra es una auténtica celestina; Siempre vas de quijote por la vida; Mi padre, de joven, era un donjuán.
    b) Muchos objetos, aparatos, sistemas y productos que pasan a ser designados con el nombre propio de su inventor, de su descubridor, de su fabricante o de la persona que los popularizó o en honor de la cual se hicieron (zepelín, roentgen, braille, quevedos, rebeca, napoleón), o del lugar en que se producen o del que son originarios (cabrales, rioja, damasco, fez). Por el contrario, conservan la mayúscula inicial los nombres de los autores aplicados a sus obras (→ 4.3).
    c) Nombres de marcas comerciales, cuando no designan ya un objeto o un producto de la marca, sino, genéricamente, cualquier objeto o producto de características similares (→ 4.22).
    6.4. Los nombres comunes genéricos que acompañan a los nombres propios de lugar, sean geográficos (→ 4.7) o de espacios o vías urbanas (→ 4.10).
    6.5. Los nombres de los vientos, salvo que estén personificados en poemas o relatos mitológicos: céfiro, austro, bóreas, tramontana.
    6.6. Los nombres de las religiones: catolicismo, budismo, islamismo, judaísmo.
    6.7. Los nombres de tribus o pueblos y de lenguas, así como los gentilicios: el pueblo inca, los mayas, el español, los ingleses.
    6.8. Los tratamientos (usted, señor, don, fray, san(to), sor, reverendo, etc.), salvo que se escriban en abreviatura, caso en que se escriben con mayúscula:Ud., Sr., D., Fr., Sto., Rvdo. Solo cuando, por tradición, se han formado acuñaciones que funcionan como nombres propios, se escribirán estos tratamientos en mayúscula: Fray Luis, referido a fray Luis de León; Sor Juana, referido a sor Juana Inés de la Cruz; Santa Teresa, referido a santa Teresa de Jesús.
    6.9. Los títulos, cargos y nombres de dignidad como rey, papa, duque, presidente, ministro, etc., se escriben con minúscula cuando aparecen acompañados del nombre propio de la persona que los posee, o del lugar o ámbito al que corresponden (el rey Felipe IV, el papa Juan Pablo II, el presidente de Nicaragua, el ministro de Trabajo), o cuando están usados en sentido genérico (El papa, el rey, el duque están sujetos a morir, como lo está cualquier otro hombre). Existen casos, sin embargo, en que estas palabras pueden escribirse con mayúsculas (→ 4.31).



    Diccionario panhispánico de dudas ©2005
    Real Academia Española © Todos los derechos reservados
     
    #1
    Última modificación por un moderador: 4 de Octubre de 2013
  2. Melquiades San Juan

    Melquiades San Juan Poeta veterano en MP

    Se incorporó:
    3 de Diciembre de 2008
    Mensajes:
    5.147
    Me gusta recibidos:
    664
    Género:
    Hombre
    Hola Arkazul, sería bueno agregar la liga o ligas respectivas hacia el fundamento del tema. Muy interesante.

    En el apartado 3.5 señalado con rojo:

    3.5. Antes era costumbre, en los poemas, emplear la mayúscula al principio de cada verso, razón por la cual las letras de esta forma tomaron el nombre de «versales» (mayúsculas de imprenta). En la poesía moderna, esta costumbre está en desuso.

    Todavía es un uso muy frecuente, y dudo mucho que marche hacia el desuso, Octavio Paz (premio nobel de literatura 1990) Tomás Segovia (hispano mexicano) poeta muy laureado Premio FIL. ver en wikipedia; y muchas otra figuras reconocidas de la poesía aun usan la letra versal al inicio de cada verso en determinados poemas con propósitos específicos de entonación o estéticos. Basta hojear un poco las publicaciones de los nuevos autores para verificar que el mentado desuso es una apreciación muy cuestionable. Tiene partidarios y detractores, eso sí, como todas las cosas inherentes a la actividad creativas. Pero en el ambiente de los poetas las limitaciones a su expresión artística son redundantes y se contraponen a su universo creativo, de hecho puedo afirmar sin temor a equivocarme que, las restricciones se vuelven material de inspiración para crear, se vuelven un desafío para el poeta. Las corrientes (paradojicamente) que más se resisten a la creatividad son, por supuesto, las conservadoras, las que trabajan con reglas y métodos estrictos que quizá por la naturaleza finita en ciertos aspectos se vuelven mentalidades ortodoxas, restrictivas, renuentes a todo "cuanto no debe ser".

    La letra versal que me suena más ligada a verso que a imprenta, pues la relación que tiene con la imprenta es por el tamaño y estilo de sus tipos (mi abuelo tenía un periódico, y recuerdo que en los artículos importantes como el editorial la primera letra era una gigante, muy garigoleada, los maestros impresores las tenían en un sitio aparte, versales o versalitas en el argot de ellos) y que no dudo pueda tener otros usos. Pero la letra versal que utilizamos en la poesía puede ser mayúscula o minúscula, hoy predomina el uso de la minúscula por sobre la mayúscula, los poetas modernos la prefieren, pero el uso de la versal en mayúscula igual sigue siendo muy utilizado.

    No es este uso la única variante en el lenguaje utilizada por los poetas. Recordemos que el poeta hacen arte con los lenguajes, es como un pintor o un músico, los colores, la luz, los sonidos la palabra son los elementos para su creatividad. Un pintor de paredes o de fachadas sigue las reglas convencionales para su oficio, un pintor de cuadros o murales tiene otras perspectivas y no cae en las limitaciones del pintor de pared, para el que una gota de color diferente en su trabajo le es aberrante y le puede costar el trabajo. Igual sucede con la música, para los barrocos, románticos, impresionistas, ect. escuchar a Schömberg y sus dodecafonías les es aberrante e impensable. Los poetas utilizan muchos recursos no regulados por las academias de la lengua, y los mismos integrantes de la academias de la lengua les reconocen este uso, los poetas y escritores de a "deveras" jajaja ( nosotros somos aficionados, excepto alguno que otro ganador o merecedor del nobel, Principe de Asturias, o Cervantes que tenemos por ahí de incógnito) usan un lenguaje excepcional para decir lo que los otros usuarios de la lengua dicen con las palabras debidas, juegan con el significante de la lengua, con los auxiliares de puntuación, con la colocación de las palabras. Inventan términos o los modifican para sus propósitos artísticos. Por fortuna, al menos en la Academia Mexicana de la Lengua, una gran cantidad de las sillas de los miembros, y su mismo presidente Jaime Labastida, son poetas. Les he escuchado en diferentes foros versar sobre el tema del uso del idioma por parte de los poetas y escritores.

    Hacemos Poesía Española, y poesía en español porque es la lengua que hablamos. Quienes gustamos de la primera nos ajustamos a las reglas y costumbres reconocida. Los que gustamos de la segunda y usamos el español porque es el idioma que hablamos, ponemos atención a la melodía del pensamiento para adecuarla al ritmo de la palabra y también jugamos con él, lo desafiamos un poco; a lo viejo lo volvemos parte de lo nuevo cuando hay en ello una forma de provocar una impresión emotiva o visual. Siempre con un propósito en mente directamente relacionado al espíritu de búsqueda que es el espíritu del artísta, del poeta. Muchas veces escuché a Tomás Segovia disertar sobre estos tópicos; y a Octavio Paz, en mi juventud; a Alí Chumacero sobre los empedrados llenos de comas y puntos excesivos; a Labastida y a tantos poetas y escritores que en un tiempo tomé como un referente, en las ferias del libro, en tertulias literarias y clases magistrales.

    En el uso de la lengua como instrumento creativo, como en otras tantas manifestaciones de la creatividad humana, la regla que parece se observa y que funciona para transformar visiones, concepciones y demás hierbas es la de << prohibido prohibir>> para que el ser creativo se manifieste e intente.
    Aprender las normas y trascender es casi casi el evangelio del artista.
    También hay quienes rinden devoción a lo establecido y los salvaguardan para preservarlo hasta el fin de la humanidad, en relación con la música soy uno de ellos, un melómano, y gusto de la música escolástica o "clásica" en sus diferentes etapas.

    Un poco de reflexión con ese 3.5 que nos has traído por aquí y que me ha permitido recordar y reflexionar de una forma muy particular sobre el tema. Recuerdo haber traído al Portal un tema parecido y haber dejado la liga al sitio de la RAE un tema relacionado con la letra versal y su uso en la poesía.

    ***


    Algunos datos para los lectores.
    Libro: "Lo mejor de Octavio Paz" > Semillas para un himno, [1950-1954] Octavio Paz, Editorial Six Barral.

    El día abre la mano
    Tres nubes
    Y estas pocas palabras

    AL ALBA busca su nombre lo naciente
    Sobre los troncos soñolientos centellea la luz
    Galopan las montañas a la orilla del mar
    El sol entra en las aguas con espuelas
    La piedra embiste y rompe claridades
    El mar se obstina y crece al pie del horizonte
    Tierra confusa inminencia de escultura
    El mundo alza la frente aún desnuda
    Piedra pulida y lisa para grabar un canto
    La luz despliega su abanico de nombres
    Hay un comienzo de himno como árbol
    Hay el viento y nombres hermosos en el viento


    Observese que:
    La versal aquí está al inicio en todos los versos, la palabra AL ALBA toda con mayúscula.
    No contiene un solo signo de puntuación, pero sí, obviamente, la acentuación y la ortografía.

    Lea cuidadosamente cada verso y reflexione cómo es la relación entre ellos dentro de la obra. Así comprenderá cuál es el uso que el poeta da a la versal en Mayúscula al principio de cada verso.





    Los poemas:

    FABULA
    MANANTIAL
    PIEDRA NATIVA

    que son parte de la misma obra, todos están escritos con la letra versal en mayúscula al principio de cada verso.

    La obra de Tomás Segovia, casi en su totalidad está escrita en ese estilo.

    Alguna vez traje al portal un tema sobre el uso de la letra versal en mayúscula o minúscula al principio de cada verso porque algunos colegas pensaban que era un error gramatical. Coloqué las ligas hacia el fundamento del tema. No lo pude localizar, pero si lo hago, las coloco en esta respuesta para aportar información a los lectores.



    Te dejo un abrazo, gracias por traernos el apunte, a ver si nos obsequias las ligas para ver las fuentes e invitar a los amigos de mi café literario a discutir el tema, escribirle al autor y/o publicar al respecto para saber cuál es su concepto de moderno, contemporáneo, etc.
     
    #2
    Última modificación: 10 de Septiembre de 2013
  3. MP

    MP Tempus fugit Miembro del Equipo ADMINISTRADORA

    Se incorporó:
    29 de Diciembre de 2004
    Mensajes:
    17.294
    Me gusta recibidos:
    1.399
    Género:
    Mujer
    Muy útil tu tema, y la ampliación del mismo de Melquiades respecto de las versales, e incidiendo en esto último tampoco debemos olvidar que en poesía (no tanto en prosa) se permiten y se hace uso de algunas "licencias" como, por ejemplo, prescindir totalmente de los signos de puntuación y del uso de mayúsculas, técnica utilizada en la poesía vanguardista por autores muy conocidos.

    Un saludo
     
    #3
  4. Arkhazul

    Arkhazul Poeta que considera el portal su segunda casa

    Se incorporó:
    14 de Septiembre de 2007
    Mensajes:
    7.764
    Me gusta recibidos:
    1.319
    Género:
    Hombre
    Gracias estimados poetas. No quise dar mi propia opinión directamente, me reservé a colocar lo que publicó la RAE sobre el tema en el 2005 y destaqué el asunto. Con esto he querido dar a considerar que en futuros certámenes poéticos, al menos en los que sólo se utiliza el español como idioma (exceptuando a los concursos de Clásica que son muy puntuales en las reglas), debería permitirse un uso más libre de las licencias utilizadas por los poetas actuales, al menos en este caso de la mayúscula inicial, y por qué no, también la ausencia de puntuación, que son las más utilizadas.

    En cuanto a los poetas de a deveras jajaja... También es bastante cuestionable, sobre todo ahora con las políticas culturales y sus bien conocidas mafias. Pueden crear fácilmente un justin bieber, les otorgan becas, premios, invitaciones a eventos dentro y fuera del país, etc. ¿ Te has fijado que los jurados son casi siempre los mismos..? Al menos en los premios importantes de México. Lee los trabajos de los ganadores y te aseguro que no son para nada excepcionales (hablo de la historia del Aguascalientes, por ejemplo), aunque mi amigo Jorge Humberto lo ganó este año. En fin. Abrazos.
     
    #4
    Última modificación: 11 de Septiembre de 2013
  5. Melquiades San Juan

    Melquiades San Juan Poeta veterano en MP

    Se incorporó:
    3 de Diciembre de 2008
    Mensajes:
    5.147
    Me gusta recibidos:
    664
    Género:
    Hombre
    Creo que fue muy bueno de su parte traer este tema a colación precisamente para evitar que ciertos criterios sirvan para descalificar y desanimar a los autores por algo que se pudiera considerar extraño o indebido.

    Tenemos más que claro que usted nos aportó la información y que no manifestó como su postura al respecto, la expuesta en el tema. Ha servido un poco para reflexionar y cuestionar, para darnos cuenta también cómo desde la cúspide de la academia andan lejos de los llanos.

    Sobre los poetas de a "deveras", entrecomillado a propósito, lo he dicho entre risas porque asiste a este portal utilizando un seudónimo, un poeta ganador de importantes galardones y premios que me ha solicitado mantenerle en el anonimato, pues él viene a este Portal nuestro a leer, y publicar muy de repente, y prefiere intentar la poesía que talvez no verán las imprentas en vez de ocuparse de cuestiones meramente teóricas. La risa ha sido como un guiño a su sencilla presencia y persona. Debe haber en nuestra casa muchos otros poetas como él, conviviendo y publicando lo que realmente les place, eso que las editoriales desechan porque no ven como comerciable.

    Yo coincido con usted amigo, en eso la mercadotecnia, que ha vuelto un producto más esta afición nuestra, veo en estos sitios la posibilidad de un tipo de poesía no sumisa a los intereses de un "mercado inducido". Mafias, favoritismos, plagios... como certeramente dice.

    También le dejo un abrazo afectuoso, y veo en el tema publicado la mejor oportunidad para comentar la percepción 3.5. Abrazos Arkazul. Gracias.
     
    #5
  6. Arkhazul

    Arkhazul Poeta que considera el portal su segunda casa

    Se incorporó:
    14 de Septiembre de 2007
    Mensajes:
    7.764
    Me gusta recibidos:
    1.319
    Género:
    Hombre
    De "a deveras", tampoco suelo utilizar entrecomillados en palabras de harto ya uso. Eso sí, en nombres de obras de poetas de a deveras y no tanto jejeje... En citas también, por supuesto. Es gratificante con sus asegunes" jejeje... sentirse poeta aunque no se sea uno de los de adeveras... Abrazos y mi admiración, que a Usted sí lo considero de adevis...
     
    #6
  7. Silvina Cancellieri

    Silvina Cancellieri Poeta recién llegado

    Se incorporó:
    20 de Julio de 2017
    Mensajes:
    1
    Me gusta recibidos:
    0
    Gracias por la información.
     
    #7
  8. viktor Huno

    viktor Huno Le poéte

    Se incorporó:
    24 de Junio de 2017
    Mensajes:
    306
    Me gusta recibidos:
    268
    Género:
    Hombre
    Excelente y muy completo el articulo, eso si bastante extenso... de verdad hay que amar esto para llegar al punto final. ☺
     
    #8
    Última modificación: 24 de Septiembre de 2018
    A MARIANNE le gusta esto.
  9. Ramon Omar

    Ramon Omar Poeta recién llegado

    Se incorporó:
    20 de Mayo de 2018
    Mensajes:
    15
    Me gusta recibidos:
    10
    Género:
    Hombre
    Respetados e ilustres Poetas:

    Nos obsequia, el poeta Arkhazul, un texto tomado del Diccionario panhispánico de dudas, referido al uso de las mayúsculas (en poesía, parece), pero no es la poesía, arte supremo y superior, la llamada a sujetarse a reglas o usos, creo. Aun más, existen unas llamadas, o mal llamadas, licencias poéticas que autorizan a las y a los poetas para hacer, sin mala educación lo digo, lo que les dé la gana para plasmar el producto de su creación, lo cual deviene en contrasentido porque la y el poeta, las y los poetas, no las necesitan, de eso ustedes saben, sin el consabido; más que yo, porque yo de saber, nada sé.

    En el cuerpo de los usos de las mayúsculas, expuestos, hay una insignificante, casi nada, mención o alusiones a la poesía, sin que el texto contradiga la dulce libertad de poetas o de escribidores de versos.

    Para concluir copio un pequeño y precioso texto de la reputada mujer de letras; Luisa Seoane Rey, experta en lenguas románicas, que sabe mucho de eso y de mucho más:

    «Lo poetas, los que lo son de verdad, no consultan a la RAE ni consultan diccionarios o gramáticas, le retuercen el cuello a la lengua hasta que diga lo que ellos quieren que diga. Por eso amamos la poesía».

    R O
     
    #9
    A MARIANNE le gusta esto.
  10. temasparatodos

    temasparatodos Poeta recién llegado

    Se incorporó:
    28 de Mayo de 2019
    Mensajes:
    1
    Me gusta recibidos:
    0
    Género:
    Hombre
    Muy buena explicación de lo relacionado a la mayuscula.
     
    #10

Comparte esta página