Cambio de rumbo

…Y correr a través de tu pasado, buscando un punto en el que recoger aquel silencio que te regalé y te obligué a aceptar sin más opción.
Supe traducir mi inseguridad en el lenguaje de una mueca inexperta y sutil pero implacable.
En brazos de la noche te ayudé a elegir un recuerdo de entre todos los que quisiste proteger y te vendí el fruto de un quizás.
Ahora es mi reloj el que se detiene, la víspera de un nuevo relato se acerca y tu voz ya no me dice cuan equivocado estaba o estoy.
Creí ser viento y era a penas brisa sobre la escalera de la gran derrota que, inconcientemente, yo mismo construí.
Son más hábiles las manos cansadas de éste siervo de la edad, que las de aquel animado ególatra, que dedicaba tantas horas a querer ser sin ser.
…Y te vas. Y de nuevo me veo en tu pasado, aislándote de la suave esencia de un suspiro.
El remedio no fue mejor que la enfermedad y caigo en la espiral de verle diferentes salidas a lo hecho. Y sin embargo lo que encuentro no son otra cosa que muchos pasados y ningún futuro.
Te pareceré esquivo y arrogante, incluso puedes tacharme de utópico y charlatán, pero debo confesar que te regalé mi adiós como muestra de ése gran amor que me unía y separaba al mismo tiempo de ti.

La incapacidad de elaborar una actitud, de manipular algunos miedos, algunas preguntas vanas… No me sedujo la idea de verme como uno más en tu lista, una flecha más que erró la diana de tu corazón y cayó al suelo ridículamente y en silencio.
Es la hora de corregir la orientación de todo. Las ansias del querer y no poder. Tu distancia agotadora, la nobleza de una sonrisa que llevo marcada en la memoria.
La soledad fue un buen lugar donde apreciar la luz, lo ecuánime, lo imprescindible de separar aquello que realmente importa de lo que no.

Si en esta vida no podemos, te buscaré en la siguiente para seguir intentándolo. Y aunque caiga mil veces en mil vidas, lo soportaré solo por verte feliz.

 

Buen fin de semana a todos/as!