A un hijo muerto

Te perdí en el bosque,
bajo vendas de flores y setas.
Mezclé mi sangre con el barro.
Intenté hundirme en el río.
Y me ahogé en las arenas de mis heridas.

Te llamé Olvido,
buscando a tientas en mi vientre vacío.

El camino sigue lleno de hojas.
Arboles ofreciendo vida.
Aún sigue el sol rebosando luces.
Y mis manos huecas.
Mis pies sosteniendo Olvido.

Te perdí y te dejé agonizando la luna.
Mañana y sólo mañana.
Olvido.

 

Duro tema Margarita. No se si es solo una inspiración o una realidad, en cualquier caso en un tema muy serio que has expuesto, bajo mi punto devista, de forma magistral y con elegancia.

Besos.

 

Querido amigo la inspiración se alimenta de la realidad, éste es ambas cosas, gracias por considerarlo, no sé si en realidad he hecho bien en ponerlo en el foro, pero hecho está. Saludos.

 

Muy triste lkas despedidas son, sin más el adiós nos persigue y la muerte siempre es el destino en que irremediablemente nos vemos sumergidos...

Un beso

Eugenio :S

 

Sí que la muerte nos persigue, es necesaria e irremediable, me obsesiona la muerte. Besos y gracias.

 

Tema dificil pero bien tejido. Solo espero, que sea la inspiracion de la poetisa y no algo personal en cuyo caso irian hacia la autora mis mayores y mas sentidos respetos por su perdida. Permiteme llamarte poeta.
Un fuerte abrazo.

 

gracias Raul por tus comentarios y visita, piensa que también el poema tiene su lado de optimismo y positivismo en el "mañana", saludos.

 

El camino sigue lleno de hojas.
Arboles ofreciendo vida.
Aún sigue el sol rebosando luces.

Sabes que no habrá Olvido, Margarita, pero en estos versos hay esperanza.

Triste realidad y hermoso poema, pero aún hay Vida y llegará con ella la belleza.

Un besazo

 

Es un tema triste y como dicen los anteriores, difícil. Solo podemos valorar el poema y a mi me ha encantado. Yo también observo esperanza ("El camino sigue lleno de hojas/Árboles ofreciendo vida..."). Besos.

 

Me alegra volver a tener el placer de tu visita, espero que estes muy bien. Mañana es epseranza. Un abrazo muy fuerte.