Contemplar al poeta

Místico en su refugio de marfil
y el mirar hacia dentro
Navegante en el silencio más profundo
en la mar de la soledad
a bordo de una nave transparente
Alquimista de alguna forma de placer
que surgió del dolor
o del amor
que dejó de ser placer

Contemplar al poeta

Entrar a la vereda de su jardín encantado
con las plantas desnudas
con el alma despierta
con los ojos cerrados
Pendiente a los sonidos de una luz
que se esconde en la letra

El poeta dormido y extraviado en su letargo

Y si despierta

Y si regresa

Burda carnalidad
sostenida por huesos

versos de una mañana de otoño de 2015.

©Melquiades San Juan/CFV

 

Enorme tu poema Melquiades, tu oficio de poeta nato se desborda. Un abrazo, saludos cordiales

 

Qué amable, poeta Maldonado. Un placer saludarte, abrazos.