Árbol seco (Liras)

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Al olmo viejo, hendido por el rayo
y en su mitad podrido,
con las lluvias de abril y el sol de mayo
algunas hojas verdes le han salido.

A. MACHADO. A un olmo seco
​

Las hojas en su vuelo
se embarcan en un viaje con el nudo
del aire; baja al suelo
su verde, y al desnudo
quedan el árbol frío, seco y mudo.

Las ramas, con la ropa
única de madera endurecida,
cubren toda la copa
de vientos esparcida
con la danza de aquestos removida.

¡Dulcísimo árbol seco,
morada de los trinos, de cantores
que avisan con su eco
triunfos de los amores
de pájaros del tronco moradores!

Asciende tu hermosura,
ébano sin la túnica bonita,
virginal, siempre pura,
que nunca se marchita
con el tacto del Céfalo que irrita.

Madera de madera,
clavo en el suelo fértil, convocada
al fuego de la hoguera
de piedras rodeada,
a alimentar la flama destinada.

 

DAVID
Una demostración brillante de tu
excelencia poética con tus liras.

Un abrazo cordial con estrellas.​

 

excelente,magnífica demostración de dominio poético,un placer disfrutarlo

 

Bellísimos...qué gusto me da leerte...

 

Muchas gracias por tu comentario, Guillermo, uno de los cuales admiro más y me influyen más,
otro abrazo.

 

Y a mi que me leas, ludmila.

Un saludo.

 

Muchas gracias, tomaldo.
Un saludo.

 

Preciosas y justísimas liras que demuestran tu calidad poética.

 

Endemoniadas liras, amigo David, hasta que al fin, emborrachado de San Juan de la Cruz, logré hacrme con sus sutiles cambios de ritmo y rima. No sé mandarte estrellas, pero si puedo enviarte mi aplauso más sincero.

 

Me agrada que te hayan gustado estas humildes liras.
Saludos.

 

Maramín, ya te sigo
el juego do realizas acrobacias,
y humildemente digo,
amigo, sin falacias,
por este comentario muchas gracias.

 

Muchas gracias por tu comentario.
En verdad son sutiles los cambios de ritmo y rima, y como me dice Maramín, musicales. San Juan es un maestro con su Cántico Espiritual, que es una cosa excelente, pero no olvidemos a Garcilaso, su inventor ("Al son y lira mía...") y a Fray Luis, otro maestro en esto de las liras.
Un saludo.

 

No puedo criticar, más sí dejaré mi opinión... Lo dificil de las liras en tu pluma no se ve.
Estrellitas armoniosas, porque al igual que al olmo de Machado le salen hojas nuevas, en tu pluma siempre retoñen las semillas de la inspiración.

 

Te dejo reputación y mil estrellas
un beso
Rosario

 

Las liras no son para nada difíciles, son armoniosas, como tú...
Un abrazo.

 

Muchas gracias, parece que ha sido de tu gusto...
otro beso.