Tratando de no volver a incomodar

TRATANDO DE NO VOLVER A INCOMODAR

Dime quién fui,
dime, acaso, quién soy.
Palabras mudas, ojos ciegos,
vista cansada, boca hambrienta.

La pluma sin tinta de mi dedo
ya no se desliza por tu espalda.
Mi otro yo, mi furia desbocada,
mi camino de vuelta siempre sin ti.

Este encanto que desencanta,
mi brújula por si te pierdes.
Me extraña que me extrañes,
y todo esto resulta tan extraño.

Camino a tientas por la noche,
tu brillo suele enceguecerme.
Percibo las señales de humo
de un fuego que decidimos apagar.

Te he buscado cuando no sabías,
me has encontrado cuando no debías.
Es el destino tan puto y retorcido,
que nos deja atados de pies y manos.

Dos son compañía, y tres… ya sabes,
soy un extraño deambulando por ahí,
dando vueltas por tu inconciente,
tratando de no volver a incomodar.

 

Anímate estas cosas ocurren y no es tan malo como pensamos, creo que es demasiado bueno jaja depende el ojo q lo mira o la vida q lo vive...Al menos en poesìa te quedo tan natural, tan sentido, es una mezcla extraña de sentimientos es una resignacion rebelde, es bronca,es dolor...te quedo muy bueno el poema
Un fuerte abrazo
Ximena

 

Gracias Ximena por tus palabras.
Un beso grande