El día en que morí

El día en que morí,
vinieron tres pastores a salvarme,
y a todos absolví.

El día en que morí,
viniste con tus lágrimas de azúcar
a regalar mis ojos,
y el encuentro pactado en el camino
fue un reflujo salado en tu recuerdo,
y amargo en ese paladar
en que te mueves,
entre tu verde cuento de naranjas,
y el cálido perfume de azahares,
endulzando tu esencia en cada gota
de cada espina.

El día en que morí,
descubriré que no soy yo el que muere,
sino todo lo fútil de la vida.
Y lloraré por todo lo que amaba entre las ruinas,
por darme cuenta de lo poco
que todo significa.

El día en que morí,
siempre acabo siendo más sabio
en mis cenizas.
Y me vuelvo al rincón de tus naranjas,
y tu rincón es verde, es tibio, es seco, es mío.
Y te vuelvo a querer entre las ramas,
entre tu muerte y mi muerte,
en la memoria,
que es una sílaba menor que la esperanza.

El día en que morí,
vinieron cinco dioses carroñeros,
y entonces comprendí.

 

Uffffff, esto te deja con un sabor agridulce que me encanta.
Un inmenso placer.

Besos.

 

Gracias M. Mar, siempre eres muy amable. Besos.

 

Cuanto talento y sentimiento en esta nueva poesía tuya, me encanta la musicalidad que tiene, lo hace muy amable, pues da la impresión de escucharlo entre las imágenes que has colocado de árboles y plantas, su comienzo y su final son hermosos, pero el final, que tu ya sabes es tan importante en un poema, deja temblando, porque quien te lee de alguna manera comprende que pasan cosas mas allá de el y al dejarlo abierto de esa manera permites todo un juego imaginario.

Los recuerdo, la soledad, la memoria que ya es parte del olvido, lo vegetal, la tierra seca, los naranjos con ese color maravilloso, ese morir pero también renovarse desde la cenizas... todo en el me ha encanto.

Un abrazo grande desde Mendoza

 

el día en que morí, me di cuenta que estaba vivo.

queda tanto por entregar.

muy buen escrito amigo.

saludos.

 

Muchas gracias Gus, por leerme tan bien como siempre, por estar aquí. El final es muy abierto, pero es simple..
Un gran abrazo desde Villanueva.

 

Tengo que venir un día a quedarme un ratito por aquí ,traeré un buen tinto de tierra de barros y brindaré con tus poesías,un abrazo

 

"El día en que morí,
descubriré que no soy yo el que muere,

El día en que morí,
siempre acabo siendo más sabio"

Este poema es hermoso y de un "existencialismo" absoluto. (Algo que no me convence del todo es en las líneas que cito al principio: Creo que el tiempo en los verbos no coinciden muy bien y eso hace que el ritmo y la secuencia -a mi modo de ver muy partícular eh Francis- se me pierdan un poco. No sé, tal vez yo esté errada pero es mi humilde apreciación. Te admiro mucho y en general el poema es para sublimarse reflejando espacios en él. Un fuerte abrazo y mis estrellas a tu incuestionable talento.!

 

Excelente poema.....
Amigo muchos sentimientos encontrados en este hermoso poema.....
Gusto leerte..

 

Me declaro adicta a tu poesía amigo, y en estos versos que hay resignación por lo muerto, melancolía por los recuerdos, y una dulzura escondida.
y siempre se muere, para volver a vivir, o renacer.besos

El día en que morí,
siempre acabo siendo más sabio
en mis cenizas.
Y me vuelvo al rincón de tus naranjas,
y tu rincón es verde, es tibio, es seco, es mío.
Y te vuelvo a querer entre las ramas,
entre tu muerte y mi muerte,
en la memoria,
que es una sílaba menor que la esperanza.

 

Brindaremos con ese buen tinto amiga, con tus poesias y con las mías. Gracias Rosario.
Un abrazo.

 

Y por recibir. Gracias Diego. Saludos.

 

Gracias querida Tuti. Lo de los tiempos verbales es intencionado, aunque quizá tengas razón y quede un poco raro, pero así me salió..
Me alegro de que en lo demás te gustara.
Un abrazo fuerte.

 

Me alegra que te gustara Ccoello. Gracias por pasar. Saludos.

 

Gracias Azul. La muerte es vida, y la melancolía muy dulce..

De esa adicción yo me alegro..
Besos.

 

Que triste poema, aunque es hermoso, un gusto pasar

 

¡El dia que Mori¡ me vestia de llanto me vestia de ausecia, me puse el traje de sombi, y despues de tanto llanto , de tanta crul ausencia, decidi volver a la vida , asi amigo la vida es bella con matices , dura pero bella, hermasa como tus Versos, ¡Hermoso¡ aunque llenos de trsiteza me hablan de tus penas.

¡Excelente¡

Saludos.

 

Me gustó tu enfoque Anita, las estaciones. Pero mi naturaleza está loca, y la primavera no sigue al invierno, hay tantos inviernos..
La verdad, me da igual, no distingo vida o muerte, y a las dos les llamo vida :::lengua1:::
Gracias por recoger padazos..
Besos Vandi guapa.

 

Me alegra que te gustara Seiri. Un saludo.

 

Has hablado bien Melao, bellas tus palabras, gracias. Saludos.

 

Pues yo disfruto de que disfrutes. No tendría mucha gracia si todo quedara al descubierto, no? Pero por lo menos sí hay que dar pie a las interpretaciones y no hablar en chino.
Gracias, un abrazo María.

 

Espero que encuentres un bello rincón Aubriel
Muchas gracias.
Besos.

 

cojonudo tu poema compañero. te felicito...un abrazo fuerte...

 

¡Qué poema tan buenísimo! "El día en que morí... entonces comprendí" realmente genial, da que pensar.
Estrellas y un abrazo

 

Gracias amigo, otro abrazo para tí.

 

Qué bien que te haya gustado tanto Cibeles

Gracias, un abrazo.